Dicen que en los primeros minutos después de despertarnos tenemos una atención más limpia, nuestro cerebro absorbe con mayor facilidad información relacionada con textos o frases e imágenes. Si te levantas con el slogan en tu cabeza “hoy es otra oportunidad para vivir la vida que quiero” es distinto al slogan “vaya, otro día igual, vaya aburrimiento“… ¿cambia bastante no?
Quizás a cualquier persona relacionada con la política en nuestro país, le conectaría con la pregunta ”¿ para qué desempeño esta función en la sociedad ?” leer el preámbulo de la constitución española (puede parecer aburrido pero es muy interesante):
Quizás las cosas cambiarían de rumbo en nuestro país si todas las personas relacionadas con el gobierno (o la oposición) leyeran detenidamente estas sencillas intenciones cada mañana al despertarse.
Los gobernantes de este o cualquier país pueden tener la sabiduría de hacer eso todas las mañanas… o quizás no tengan esa sabiduría. Independientemente de que lo hagan o no, si esperamos a cerca de la calidad de nuestra vida en función de los demás, estamos dando todo el poder a cerca de nuestras vidas a los demás, en este ejemplo, el gobierno.
¿Y TUS INTENCIONES?
Como seres humanos tenemos la capacidad de dirigir nuestros esfuerzos y recursos en la dirección que queremos. En el camino nos solemos encontrar obstáculos en el entorno y también obstáculos o limitaciones individuales. Por ejemplo si nos planteáramos hacer una maratón, puede que ese día llueva o haga mucho calor, puede que alguien tropiece con nosotros o que se llegue tarde al pistoletazo de salida porque había mucho tráfico (¡vaya plan!). Todo estos serían obstáculos externos a nosotros y son incontrolables. Nuestras limitaciones individuales se refieren hacia lo que T. Gallwey llamaba nuestro juego interior, es decir, cómo nos manejamos mental y emocionalmente delante de retos y dificultades en el camino. Por ejemplo cuando nos decimos a nosotros mismos que no podemos hacer algo o no somos capaces, cuando queremos hacer algo pero tenemos miedo de hacerlo. Eso, las limitaciones y miedos propios, si que están en nuestras manos.
Más allá de los obstáculos externos a nosotros y de nuestras propias limitaciones, nos proponemos conseguir objetivos en la vida. Estas son algunas preguntas interesantes a hacerse:
- ¿qué es lo que quieres conseguir?
- ¿hacia dónde quieres dirigirte?
- ¿qué tipo de vida quieres para ti y para los tuyos?
- ¿qué está en tus manos para llegar ahí?
- ¿para qué quieres llegar ahí?
- ¿qué te lo impide?
- ¿si supieras que no puedes fracasar, qué harías?
Prácticamente todos los libros que he leído a cerca de conseguir nuestros propósitos hacen hincapié en 4 aspectos:
- DEFINE / ESCRIBE la intención de manera sencilla o encuentra un texto que represente tu propósito.
- IMAGINA con mucho detalle cómo será ese resultado, o encuentra fotografías que representen tu intención.
- VIVE LA SENSACION que tendrás cuando hayas logrado eso que te propones.
- SABIDURIA: imaginando que ya has conseguido eso que quieres, mira hacia al pasado y observa los pasos que has dado.
Así de sencillo, y funciona igual para grandes o pequeños propósitos, desde cepillarse los dientes a las mayores hazañas del ser humano. Un día alguien creyó que una máquina llegaría a volar, otros creyeron que era posible construir una casa de 70 alturas, y los más locos, que era posible viajar fuera del mundo.
A partir de aquí, es fácil decir que si, que los gobernantes deberían tener presentes todas las mañanas ese preámbulo de la constitución. ¿y tú? ¿qué escrito sería inspirador para ti? ¿qué fotografía te haría levantar con decisión hacia aquello que deseas? Esto, si que está en tus manos.
muevetumundo, genera la vida que deseas.